El Ayuntamiento de Gijón/Xixón reforzará la seguridad vial con nuevos semáforos en los pasos de peatones de las vías de 50 km/hora y dos carriles

El Ayuntamiento de Gijón/Xixón reforzará la seguridad vial con la instalación de nuevos semáforos en los pasos de peatones de las vías de dos carriles donde el límite de velocidad sea de 50 km/hora. Los trabajos comenzarán este mismo año por las avenidas Torcuato Fernández Miranda (en los cruces con Pintor Marola, Carreño Miranda, Martínez Abades y París) y José Manuel Palacio (junto a las oficinas del Principado). “El objetivo es implantar medidas de seguridad que contribuyan a mejorar la convivencia entre vehículos a motor, ciclistas y peatones”, explicó el concejal de Tráfico, Movilidad y Transporte Urbano, Pelayo Barcia.

"La reforma de la Ley de Seguridad Vial realizada por el Gobierno de España en 2021 redujo los límites de velocidad a 30 km/h en las calles de un solo carril por sentido, lo que mejoró la seguridad vial. Ahora toca que desde el ámbito municipal sigamos esta senda”, agregó el edil. La concejalía que dirige ha detectado que existen varias vías en Gijón que reúnen las características para implantar una nueva semaforización, especialmente porque “algunas son salida y entrada de la ciudad o soportan altos flujos de tráfico”.

• Avenida Torcuato Fernández Miranda.

• Avenida José Manuel Palacio (oficinas del Principado).

• Eleuterio Quintanilla.

• Marqués de San Esteban (calle Zamora).

• Plaza Sara Suárez Solís.

• Pintor Luis Pardo (cruce con la calle Don Quijote).

• Muros de Galicia.

• Camino Lucero (a la altura del Club Santa Olaya).

• Nuevo Roces.

• Doctor Fleming (a la altura del Puente Inglés).

• Cienfuegos.

• Balmes.

• Gran Capitán y Brasil (donde hay un carril y carril bus).

• Justo del Castillo y Albert Einstein (en el entorno de las glorietas).

• Avenida Pecuaria.

• Polígono.

• Pintor Alejandro Mieres.

• Rodríguez San Pedro (frente al edificio Urquijo).

Por otra parte, el Consejo Sectorial de Movilidad será convocado para finales de febrero. Así lo indicó Pelayo Barcia, quien explicó que, tal y como se había informado el pasado septiembre, la condición para su convocatoria era la puesta en marcha del Servicio de Apoyo Jurídico a la Movilidad, que ya está activo desde este pasado lunes 22 de enero. Además de su constitución como tal, “el objetivo es abordar el inicio de la tramitación de la Ordenanza de Bajas Emisiones y de la Ordenanza de Movilidad”, señaló el edil.

Respecto a la Ordenanza de Bajas Emisiones, recordó Barcia, “debe respetar en la medida de lo posible los límites físicos en el barrio de La Calzada, heredados del anterior Gobierno y que fueron blindados con su vinculación a la convocatoria de fondos europeos Next Generation”. Sin embargo, precisó, “también debe respetar los límites políticos que fueron fijados por los gijoneses en las pasadas elecciones” donde los partidos elegidos para gobernar, bien en sus programas o bien durante el anterior mandato, establecieron los siguientes requisitos:

• Ser una zona informativa, sin sanciones, hasta que el vial de Jove (GJ-82) esté operativo.

• Mantener el permiso de paso y estacionamiento a los vehículos adquiridos previamente a su entrada en vigor que pertenezcan a residentes, PYMES y/o autónomos.

• No tener fines recaudatorios. “No existirá la opción de pagar para incumplir a través de un precio público o de parkings que eximan de su cumplimiento”, detalló Barcia.

• Los niveles de acceso se determinarán por la condición de los interesados en acceder (residentes, trabajadores, empresas, etc.) y no por el modelo de vehículo que posean.

• Las restricciones no serán permanentes, sino graduales y vinculadas a episodios de contaminación ambiental.

“Respetando estos límites físicos y políticos, estamos abiertos a escuchar cualquier propuesta que ayude a que Gijón tenga esta ordenanza”, aseveró el concejal.

Asimismo, sobre la Ordenanza de Movilidad, recordó que “el tiempo nos ha dado la razón y la anulación judicial de la Ordenanza impuesta en el anterior mandato no ha generado ningún problema a la ciudad. Ha quedado claro que los presagios fatalistas volcados desde la izquierda, vinculando su anulación con la pérdida de fondos europeos, eran falsos, dado que no ha sucedido nada de lo que pronosticaban”. No obstante, concluyó Barcia, “entendemos que es necesario tramitar una nueva ordenanza para incorporar aspectos y matices que no están sobradamente definidos”, como puede ser el uso de los patinetes eléctricos o el estacionamiento regulado, entre otros.