La Solitaire du Figaro Paprec, competición internacional con un único tipo de barco, por tiempos y sin asistencia, que se disputa por etapas y que organiza la sociedad OC Sport-Pen Duick, arranca el 17 de agosto en Rouen (Francia), para llegar a Gijón/Xixón por la décimoquinta vez en su historia - y primera desde 2017- el jueves 29 de agosto, y concluirá en Royan (Francia) a mediados de septiembre.
El recorrido de la 55ª edición de La Solitaire du Figaro Paprec comprenderá así tres etapas inéditas del 17 al 15 de septiembre: 1.840 millas náuticas entre Rouen (Seine-Maritime) y La Turballe (Loire-Atlantique), pasando por Gijón/Xixón (España), única ciudad española que acogerá la regata francesa, y Royan (Charente-Maritime).
La Solitaire du Figaro Paprec está considerada como una de las pruebas reinas de la navegación oceánica, cita imprescindible para los regatistas profesionales y antesala de grandes regatas internacionales oceánicas.
Ángela Pumariega, vicealcaldesa de Gijón/Xixón: “Es un gran honor acoger de nuevo en nuestra ciudad una de las etapas de La Solitaire du Figaro Paprec. Esta será ya la 15º visita de esta icónica regata a Gijón, por lo que ya es una de las escalas emblemáticas de la historia de la Solitaire. Gijón cuenta con todo lo necesario para recibir a los navegantes y a la organización. Aquí encontrarán la escala perfecta para recuperar fuerzas y continuar carrera. Además, para nosotros es una oportunidad única de mostrar todos los atractivos turísticos de la ciudad a todos los seguidores de la regata y animarlos a visitarnos. Seguro que Gijón/Xixón les sorprenderá”.
La regata francesa, que celebrará su 55 edición, recaló por primera vez en Gijón en 1991 y hasta 2004 se vio casi todas las temporadas a sus veleros en los pantalanes del Puerto Deportivo. Tuvo un paréntesis hasta 2010, para repetir en 2012, 2013 y 2017. El próximo verano, sus navegantes volverán a reencontrarse con la bahía de San Lorenzo por decimoquinta vez.
La épica de la navegación en solitario ha contribuido a que esta regata se encuentre entre las de mayor prestigio de la vela mundial, lo que lleva que cada edición sea seguida de forma masiva por aficionados de todo el mundo y se convierta en un gran vehículo de promoción de cada una de las ciudades que se asocian a la competición francesa.
Será la única ciudad española que acogerá la regata francesa, que constará de tres etapas y más de 1.840 millas de navegación.