Durante su infancia no faltaron las pachangas en la pista polideportiva de la Casa del Mar, a la que se accedía “saltando la valla”. Habituales también eran los partidos en la pista abierta de las 1.500 y sobre la tierra de la calle de Filipinas, que en aquellos ochenta todavía no estaba asfaltada. El concejal de Actividad Física y Deporte, José Ramón Tuero, ha sido testigo de cómo ha cambiado la ciudad el Patronato Deportivo Municipal (PDM), organismo que preside y que en 2022 cumple su 40 aniversario.
El cambio del PDM en estas cuatro décadas ha sido exponencial.
Hemos pasado prácticamente de tener solo el pabellón de La Arena, a más de un centenar de instalaciones municipales, colegios con pistas deportivas cubiertas y lugares para hacer deporte por todos los barrios. El equipo de trabajo también ha crecido, y hoy tenemos más de setenta empleados directos y más de sesenta indirectos.
A diferencia de otras ciudades, donde la gestión del deporte recae directamente en la concejalía de cada ayuntamiento, en Gijón tenemos el PDM como organismo gestor.
Hoy en día, la tendencia es que los patronatos se vayan integrando en la concejalía y que ésta gestione directamente. Muchos se están disolviendo, pero aquí defendemos nuestro modelo. El PDM tiene personalidad propia, con cuarenta años de historia reconocida. Aunque la legislación hoy no es diferente a la que aplica en el resto de organismos del ayuntamiento, Sí es cierto que en su día en el Patronato la burocracia administrativa era más flexible y eso facilitaba las cosas. Hoy sigue siendo un poco más ágil, pero no es solo eso. En el PDM se trabaja todos los días, porque gran parte de las pruebas deportivas son en fin de semana. Organizamos grandes eventos como el hípico, en el que tenemos una comunicación diaria con los diferentes clubes y patrocinadores privados, como Caja Rural de Asturias, Unicaja, Funeraria Gijonesa, Lacera, MBA, Renault, Suzuki, Joluvi y muchos más.
¿Cómo se ha adaptado el PDM al envejecimiento poblacional que ha sufrido Gijón?
Nuestro programa más importante es el de las Escuelas Deportivas, donde se trabaja la base. Hablamos de 6.000 gijoneses de 6 a 16 años. Gracias a convenios con clubes y federaciones, creamos el hábito de hacer deporte. Este año el presupuesto se ha incrementado de 420.000 a 600.000 euros. Es cierto que Asturias está envejecida y eso nos ha obligado a adaptarnos. Fruto de esos cambios, lanzamos programas como Caminando por la vida, en colaboración con la Fundación Municipal de Servicios Sociales, o las actividades acuáticas dirigidas a personas en edad avanzada. Se han hecho programas específicos para estas personas y estoy satisfecho con el trabajo realizado. También tenemos actividades nuevas para los jóvenes, como la calistenia, planificada en el anterior mandato, y deportes urbanos como el skate.
Precisamente se tiene prevista una renovación de los skateparks.
Sí, dedicaremos 100.000 en renovar estas instalaciones. Estamos hablando con los skaters para conocer sus preferencias. Esta es una seña de identidad del PDM: hablar con las personas para que el dinero se dedique a lo que necesitan.
La economía azul y la mirada de la ciudad hacia el mar parece que marcará muchas lineas de acción municipales en los próximos años. ¿Apostará también el Patronato?
Es un debe que tenemos en la gestión deportiva. Tenemos que mirar más al mar de lo que miramos. Los programas acuáticos que hemos hecho han sido un éxito de participación, pero hay que hacer un esfuerzo mayor.
Otro debe: muchos ciudadanos piden un mayor uso de las instalaciones deportivas de los colegios e institutos públicos.
Estamos trabajando para abrir más centros al uso deportivo de la ciudadanía. Los propios colegios tienen también voz en esto y es un proceso que precisa de una comunicación centro por centro.
Gijón está en trámites para traer un europeo de cross a la ciudad. ¿Cuál es la trastienda cuando una ciudad quiere ser sede de algún evento?
Traer eventos no es fácil y supone mucho dinero. En muchas ocaciones, es una subasta: se lo lleva el que más invierte. Las federaciones suelen poner cánones que hacen difícil postularse para algunos eventos. Se mira más la capacidad económica que las instalaciones y posibilidades hoteleras de la ciudad. En los eventos buscamos un beneficio deportivo y también que contribuya a la ciudad con una economía circular que atraiga a futuros turistas e incentive el consumo en Gijón.
Respecto a las posibilidades de práctica deportiva, ¿qué visión le transmiten sus homólogos sobre el PDM cuando se encuentra fuera de Asturias?
Siempre hablan muy bien del PDM. Lo consideran un organismo muy solvente, con un personal muy cualificado. Hemos traído eventos grandes y nuestras instalaciones son envidiadas en el resto de España. Debemos mantener esta línea.
¿Y los propios gijoneses?
El PDM goza de alta estima en nuestra ciudad. Es cierto que los eventos que organizamos a veces pueden molestar unas horas determinadas. Entiendo que a algunas personas les puedan ocasionar molestias. Me gustaría que se pensara también en el beneficio deportivo, económico y de salud que estas competiciones aportan a Gijón. También recordar que tenemos una policía local fantástica y gente muy buena en protección civil que son expertos en agilizar la organización lo máximo posible.
Clubes históricos y con muchos socios como el Club Natación Santa Olaya o el Grupo Covadonga han marcado también la historia deportiva de la ciudad. ¿Qué relación tiene actualmente el PDM con estas entidades que engloban a decenas de miles de vecinos?
Todas las entidades saben que tienen en el Patronato a su aliado. La relación es buena con la mayoría, clubes grandes o pequeños. Ese es mi trabajo: tener buenas relaciones, sin vetos ni exclusiones. En la pandemia yo mismo formé un grupo con los seis clubes más importantes de la ciudad para ir informándoles de los cambios en la normativa. Ese grupo fue el embrión de la hoy ACEDYR (Asociación de Clubes y Entidades Deportivas y Recreativas). Los clubes de Gijón tienen hoy una relación más estrecha entre ellos para intentar solucionar problemas comunes. La verdad es que me parece una idea fantástica.
Con catorce millones, el Patronato tiene hoy el presupuesto más grande de su historia.
Tenemos más presupuesto que nunca. También cabe recordar que ahora las instalaciones deportivas municipales están adscritas al PDM desde final del año pasado. Eso quiere decir que dependen de nosotros, para lo bueno y para lo malo. Supone un esfuerzo, pero estamos encantados.
Este año, el Palacio de Deportes cumple treinta primaveras. ¿Cómo le sienta al pabellón el cambio de cifra?
Hemos hecho un gran trabajo en la cubierta de la pista central, pero tenemos que mejorar las pistas auxiliares. También hemos arreglado tres cubiertas y vamos a comprar unas canastas de ACB. Hay que renovar el suelo, comprar material deportivo… Tenemos que jugar con recursos limitados.
El Gijón Baloncesto y el Gijón Jovellanos han supuesto grandes entradas en el Palacio cuando militaban en las máximas categorías. ¿Cuáles cree que son hoy los equipos más punteros del deporte gijonés?
Ahora mismo, nuestros grandes emblemas son el Telecable Hockey Club y el Club Balonmano La Calzada. Están en la máxima categoría y con gran mérito. El Telecable lleva muchos años ganando títulos y en la élite. El Club Balonmano La Calzada va segundo con muchas posibilidades de optar al título, llevarse la Copa de la Reina y jugar en Europa.
¿Hemos llegado a la igualdad en la práctica deportiva en Gijón?
Tenemos un problema muy grave en toda España: el abandono de la práctica del deporte de las niñas al inicio de secundaria. Justo en la etapa de primaria, hay más niñas que niños haciendo deporte. Este abandono me preocupa mucho y es un problema social. El deporte es bueno siempre y, en mi opinión, ser buen deportista ayuda a ser buen estudiante. La disciplina, la organización o el sacrificio son valores compartidos en muchas esferas de la vida.
Se está fraguando una gran gala homenaje por los cuarenta años del PDM. ¿Puede anticipar algo?
Es sorpresa (risas). Queremos hacer una gala importante. Cuarenta años bien merecen un reconocimiento a mucha gente que hizo grande el deporte de Gijón. Sin ayuda de toda esa gente, el PDM no hubiese podido hacer lo que ha hecho.
Entrevista al presidente del PDM Gijón, José Ramón Tuero:
«La seña de identidad del PDM es hablar con las personas para que el dinero se dedique a lo que necesitan».
«El Patronato goza de alta estima en nuestra ciudad» «Asturias está envejecida y eso nos ha obligado a adaptarnos».
«El abandono del deporte de las chicas en secundaria me preocupa mucho y es un problema social».